CONSTELACIONES SITÉMICAS : LA IMPORTANCIA DE LOS ABUELOS

CONSTELACIONES SITÉMICAS 

LA IMPORTANCIA DE LOS ABUELOS 

Los abuelos:

Pilares invisibles y fuente de orden en el sistema familiar

Bert Hellinger, el creador de las Constelaciones Familiares, nos invita a mirar más allá de lo evidente, a reconocer la profunda influencia de nuestros ancestros en nuestra vida presente. En su enfoque, los abuelos ocupan un lugar privilegiado, no como figuras lejanas o relegadas al pasado, sino como pilares fundamentales en el entramado familiar. Su presencia, aunque invisible, se extiende a través de las generaciones, tejiendo una red de lealtades, herencias y patrones que moldean nuestra identidad y nuestra forma de relacionarnos.

 

Pertenencia al sistema: un lugar para cada uno

Hellinger nos recuerda que todos los miembros de la familia, sin excepción, tienen un lugar y un derecho a pertenecer al sistema. Los abuelos, como primeros eslabones en la cadena transgeneracional, son portadores de una historia, de una fuerza vital que se transmite a las generaciones venideras. Negar o excluir a los abuelos, ya sea por conflictos no resueltos, secretos familiares o cualquier otra razón, crea un desequilibrio en el sistema, como una pieza faltante en un rompecabezas. Esta exclusión puede manifestarse en las generaciones posteriores como dificultades para encontrar su lugar en el mundo, problemas de identidad o la repetición de patrones de sufrimiento.

 

Transmisión de la fuerza vital: la herencia invisible

Los abuelos son mucho más que figuras biológicas. Son fuente de una fuerza vital que nos nutre y nos sostiene, una herencia invisible que va más allá de los genes. A través de ellos, recibimos no solo la vida física, sino también un legado emocional, cultural y espiritual. Sus valores, sus creencias, sus experiencias de vida se graban en el inconsciente familiar y se transmiten de generación en generación, influyendo en nuestra forma de ser y de estar en el mundo. Reconocer y honrar a nuestros abuelos, darles un lugar en nuestro corazón, nos permite conectar con esa fuerza ancestral, recibir su bendición y continuar el flujo de la vida con mayor plenitud.

 

Influencia en la identidad: el espejo del pasado

Los abuelos contribuyen a la construcción de nuestra identidad, a nuestra visión del mundo y de nosotros mismos. Sus historias, sus luchas, sus triunfos se convierten en parte de nuestra propia historia. A través de ellos, aprendemos sobre el amor, la pérdida, la resiliencia, la esperanza. Sus experiencias de vida nos ofrecen un espejo en el que podemos mirarnos, un mapa para navegar por los desafíos de la existencia. Comprender la influencia de nuestros abuelos nos permite comprender mejor nuestras propias elecciones, nuestros patrones de comportamiento y nuestra forma de relacionarnos con el mundo.

 

Resolución de conflictos transgeneracionales: sanando las heridas del pasado

Los abuelos pueden ser portadores de conflictos o traumas no resueltos que se transmiten a través de las generaciones, como una herencia invisible que pesa sobre los descendientes. Estos conflictos pueden manifestarse en forma de enfermedades, patrones de relación disfuncionales o dificultades para alcanzar la felicidad. Al incluir a los abuelos en las constelaciones familiares, se pueden identificar y sanar esos conflictos, liberando a las generaciones posteriores de la necesidad de repetir los mismos patrones de sufrimiento. Al dar luz a las historias ocultas y honrar el dolor de nuestros ancestros, abrimos un camino hacia la sanación y la reconciliación familiar.

 

El orden del amor: el flujo natural de la vida y los desórdenes con los abuelos

Para Hellinger, el amor fluye de forma natural de los mayores a los menores, como un río que desciende de la montaña al mar. Los abuelos dan a los padres, y los padres a los hijos. Cuando se respeta este orden, el amor puede circular libremente en el sistema familiar, nutriendo a cada miembro y generando armonía y bienestar.

Sin embargo, cuando este orden se altera, el flujo del amor se bloquea, generando conflictos y sufrimiento. Uno de los desórdenes más comunes en la relación con los abuelos se da cuando los nietos asumen responsabilidades que no les corresponden, como intentar "cuidar" o "salvar" a sus abuelos, o bien, cuando se sienten obligados a repetir patrones de comportamiento o sufrimiento de sus ancestros. Esto puede ocurrir cuando los abuelos han sufrido experiencias traumáticas o han tenido vidas difíciles, y los nietos, inconscientemente, sienten la necesidad de "reparar" o "compensar" ese sufrimiento.

Otro desorden se presenta cuando los nietos se identifican con un abuelo excluido o rechazado por la familia. Esta identificación puede llevar a los nietos a repetir el destino del abuelo, a sentirse "diferentes" o "excluidos" del sistema familiar, o a tener dificultades para encontrar su propio lugar en el mundo.

Reconocer el orden del amor y los posibles desórdenes en la relación con los abuelos nos permite ocupar nuestro lugar en el sistema familiar, recibir el amor de nuestros ancestros y transmitirlo a las generaciones futuras de una forma sana y equilibrada.

En conclusión, los abuelos son pilares invisibles en el orden del amor familiar. Su influencia, aunque a menudo inconsciente, se extiende a través de las generaciones, moldea nuestra identidad y nuestra forma de relacionarnos con el mundo.

Reconocer su lugar, honrar su legado y sanar las heridas del pasado, incluyendo los posibles desórdenes en la relación con ellos, nos permite conectar con nuestra historia familiar y construir una vida más plena, auténtica y saludable. Al honrar a nuestros abuelos, honramos nuestras raíces y nos abrimos a recibir la fuerza y el amor que fluye a través de las generaciones.

Tere Valero

- ASTRÓLOGA

- ASESORA PROFESIONAL EN ASTROGENEALOGÍA

- ASESORA PROFESIONAL DE CONSTELACIONES SISTÉMICAS

- BIODECODIFICACIÓN ASTROLÓGICA

https://www.facebook.com/tere.valeroromero.5

https://www.youtube.com/channel/UCRS7vrSNauazJErud24HOQg

https://www.instagram.com/valerotere/